RECUERDAN CRÍMENES HORRIPILANTES COMETIDOS POR RÉGIMEN DE TRUJILLO (I)

El Nacional de ¡Ahora!, 31 de mayo de 1981.

Durante la égida de Rafael L. Trujillo Molina -desde su traición al presidente Horacio Vásquez el 23 de febrero de 1930 hasta la hora de su muerte el 30 de mayo de 1961- se cometieron crímenes de todas las especies.

La vesania trujillista no hizo excepciones: cayeron profesionales, comerciantes, industriales, periodistas, obreros, militares, policías, etc. Ningún sector de la población, prácticamente, quedó a salvo.

Jamás se sabrá, con precisión, cuántas personas cayeron abatidas en una época en que el asesinato y las desapariciones físicas eran común y corriente.

José Mesón

Se registraron crímenes horripilantes como el asesinato de los esposos Martínez Reyna - Almánzar al comenzar el dominio trujillista y el de las hermanas Mirabal, en sus postrimerías.

Hubo episodios espeluznantes de delincuencia política como los fusilamientos masivos tras el asesinato del general Cipriano Bencosme; la exterminación de 32 miembros de valiente familia Perozo; el crimen cometido en la persona del general Vásquez Rivera y sus hermanos y contra la familia Patiño.

Trujillo mostró crueldad ilimitada al disponer el asesinato de quienes vinieron a combatirle con las armas en 1959 por Constanza, Maimón y Estero Hondo. La mayoría de los expedicionarios fueron capturados vivos y luego masacrados. Solo salvaron la vida los cubanos Delio Gómez Ochoa y Pablo Mirabal y los dominicanos Poncio Pou Saleta, Francisco Medardo Germán y Mayobanez Vargas.

Ya, antes, Trujillo, en 1949, había procedido con crueldad frente al grupo expedicionario que vino por Luperón. Salvaron la vida en esa ocasión, Horacio Julio Ornes, Tulio H. Arvelo. José Rolando Martínez Bonila, Miguel Feliú Arzeno y José Córdova Boniche de Costa Rica este último. Feliú Arzeno murió después de llegar, diez años más tarde, por Constanza.

Hubo también crímenes en cadena, como los sucedidos tras el secuestro en Nueva York del profesor vasco Jesús de Galíndez, el cual influyó, notablemente, en la propia muerte del tirano, pues en la cadena de crímenes cayó Octavio de la Maza Vásquez, hermano de Antonio de la Maza Vásquez.

Entre los crímenes más sonados se encuentra, asimismo, el del padre R. Barnet, asesinado a palos en la Iglesia Episcopal de la avenida Independencia de esta ciudad, por haber suministrado datos a la prensa norteamericana sobre la carnicería dispuesta por Trujillo en 1937.

Entre los miles de crímenes cometidos por la dictadura trujillista se cuentan los siguientes:

- Se ha dicho que el primero ocurrió el 26 de marzo de 1930 cuando cayó abatido Eliseo Estévez.
- El 19 de noviembre de 1930 fue asesinado el general Cipriano Bencosme y luego llevado el cadáver a Moca, siendo tirado en una cuneta. El notario Julio Sánchez, conmovido, pidió a las autoridades permiso para recogerlo y darle sepultura.
- Pulú Pelegrín, en campos de Puerto Plata; días después del asesinato del general Bencosme.
- Más de 200 personas fueron fusiladas en su mayoría campesinos, por dar albergue al general Bencosme en Puerto Plata y Moca, o por no haber dado cuenta de su paradero.
- Mario E. Guerra, periodista que escribió el Manifiesto de Desiderio Arias.
- El primero de junio de 1930 fueron asesinados los esposos Virgilio Martínez Reyna y su esposa Altagracia Almánzar de Martínez quien estaba embarazada.
- David Vidal Recio, el 23 de marzo de 1931, asesinado en plena ciudad de Santiago.
- El periodista Emilio Reyes, caído en una carretera cerca de Baní.
- Desiderio Arias, político, el 20 de junio de 1931, después de entrevistarse con Trujillo, poco antes.
- Salomón Haddad (El Turquito), asistente del general Arias, el 24 de junio, tras acogerse a una amnistía trujillista.
- Abigaíl Montalvo, líder de San José de las Matas, en 1932, denunciado por un pariente suyo.
- Rafael Patiño, progenitor de la valiente familia, el 10 de octubre de 1932.
- Rafael Aníbal Patiño, el 14 de octubre de 1932, asesinado en presencia de su padre Rafael.
- Los Patiño se acogieron a “garantías” ofrecidas por Trujillo, pues se encontraban primero en Haití. Al llegar a Pozo Prieto, en la Línea Noroeste, fueron denunciados.
- Jesús María Patiño (Chichí), en 1935 en la Capital.
- Agustín Darío Patiño (Tilo), en 1942 en la Capital.
- Gustavo Adolfo Patiño (Niní), en la invasión de 1946.
- Licenciado Andrés Perozo, en 1932, en Yerba Buena, San José de las Matas.
- César Perozo y Faustino Perozo en 1932, en Yerba Buena. Varios amigos de los hermanos Perozo cayeron asesinados y fueron enterrados en Pedregal, San José.
- José Brache, muerto cerca del teatro Rosy, en Puerto Plata, en 1931.
- Don Julio Brache.
- José Roca, en La Herradura, en 1930; Pedro Canela en Imbert; Luis Ricardo en 1932; Tiberio Santillana en 1932; Tomás Ceballos Martínez en la Capital; Gerardo Ellis Cambiaso, asesinado en las puertas de la escuela normal Salomé Ureña; Julio Pou, padre de Poncio y Expedy Pou; José Morel, en 1936, José Nicolás Cantizano Flores, el 16 de julio de 1937.
- Carlos Russo Victoria; doctor Ramón Helú B. el 28 de octubre de 1952; Santiago Lozano en 1931; Rigoberto Cerda A. en el parque Colón en 1936; Olegario Varga el 24 de junio de 1932 en Moca; Miguel Larrazábal, español; Ramón Hernández en 1953; Ramón Silverio Sandoval, empleado del First National City Bank de Santiago, en 1931, cuando dijo: “qué buen blando” al ver a Trujillo bailar en el Centro de Recreo.
- Luis Silverio en la fortaleza San Luis;⁽¹⁾ Víctor Capellán en 1945 en Santiago; general Tancredo (Quero);⁽²⁾ Eugenio Litghow en Navarrete, en la década de 1950; Fernando Suárez en 1947; Juan Morales, administrador del Banco de Reservas en 1949 y su chofer; el exiliado cubano anticastrista Policarpio Soler a quien se inculpó de la muerte de Morales.

Notas de RDH
1.- Lo asesinaron en prisión a principios de 1940.
2.- Quero apoyó el movimiento de Trujillo-Estrella Ureña del 23 de febrero de 1930. Al repudiar la escalada de crímenes de Trujillo cayó en la categoría de desafecto y fue asesinado en La Vega por órdenes de Trujillo en la Nochebuena de 1939.